El término realizable es uno de los conceptos clave en la elaboración de un balance para cualquier empresa. El balance es una herramienta fundamental para conocer la situación financiera de una empresa en un momento determinado.
El realizable es una cuenta que aparece en el activo del balance y representa los derechos que tiene la empresa sobre bienes o servicios que se espera que se conviertan en efectivo en el futuro. En este artículo, hablaremos sobre qué es el realizable en un balance, su importancia y cómo se calcula.
Realizables en un balance: definición y características
El Realizable en un Balance es un término contable que se utiliza para hacer referencia a los activos que una empresa tiene y que se espera que se conviertan en dinero en efectivo en un futuro cercano, generalmente dentro de un año.
Los Realizables se dividen en dos categorías: Realizable a Corto Plazo y Realizable a Largo Plazo. El Realizable a Corto Plazo son los activos que se espera que se conviertan en efectivo en un plazo máximo de un año, mientras que el Realizable a Largo Plazo son los activos que se espera que se conviertan en efectivo en un plazo mayor de un año.
Entre las características más importantes de los Realizables se encuentran:
- Facilidad de conversión en efectivo: Los Realizables deben ser activos que se puedan convertir en efectivo de forma rápida y sencilla.
- Valor de realización: Es el valor estimado que se espera obtener de la venta de los Realizables. El valor de realización se calcula teniendo en cuenta el precio de venta y los costos de venta.
- Valor contable: Es el valor que se muestra en el balance de la empresa para los Realizables. Este valor se calcula restando la depreciación acumulada del valor de adquisición.
- Impacto en la liquidez: Los Realizables tienen un impacto importante en la liquidez de la empresa, ya que se espera que se conviertan en efectivo en un futuro cercano.
- Tipo de activos: Los Realizables pueden ser de diferentes tipos, como cuentas por cobrar, inventarios y valores negociables.
- Importancia en el análisis financiero: Los Realizables son una parte importante del análisis financiero de una empresa, ya que permiten conocer la capacidad de la empresa para generar efectivo en el corto y largo plazo.
Cuentas incluidas en el realizable.
El Realizable en un Balance es una categoría que se refiere a los bienes y derechos que una empresa espera recibir en el futuro cercano, generalmente en un plazo menor a un año. En este artículo, nos enfocaremos en explicar las cuentas incluidas en el realizable.
Cuentas por cobrar
Las cuentas por cobrar son uno de los elementos más importantes del realizable.
Se refieren a los montos que los clientes deben a la empresa por concepto de ventas de bienes o servicios a crédito. Estas cuentas pueden ser de corto o largo plazo, dependiendo del plazo de pago acordado con el cliente.
Efectos por cobrar
Los efectos por cobrar son documentos mercantiles que representan una deuda pendiente de pago, como letras de cambio o pagarés. Estos documentos pueden ser endosados a un tercero para su cobro, lo que significa que la empresa puede ceder la deuda a otra entidad financiera.
Cuentas por cobrar a socios o accionistas
En algunos casos, los socios o accionistas de la empresa pueden tener deudas pendientes con la compañía. Estas cuentas por cobrar a socios o accionistas también se incluyen en el realizable.
Cuentas por cobrar a empleados
Al igual que con los socios o accionistas, los empleados también pueden tener deudas pendientes con la empresa, como anticipos de sueldo o préstamos. Estas cuentas por cobrar a empleados también se incluyen en el realizable.
Inventarios pendientes de venta
Los inventarios pendientes de venta, también conocidos como existencias o mercancías, son bienes que la empresa ha adquirido o producido para su venta, pero que aún no han sido vendidos. Estos inventarios se incluyen en el realizable porque la empresa espera venderlos en el corto plazo.
Impuestos por recuperar
Finalmente, los impuestos por recuperar son aquellos impuestos que la empresa ha pagado y que puede recuperar en el futuro, como el Impuesto al Valor Agregado (IVA) o el Impuesto sobre la Renta (ISR). Estos impuestos se incluyen en el realizable porque la empresa espera recibir la devolución en un plazo menor a un año.
El Realizable en un Balance es una cuenta que representa los derechos a cobrar por la empresa en un periodo determinado. Estos derechos pueden ser por ventas a crédito, préstamos o anticipos a terceros.
Es importante tener en cuenta que el Realizable se clasifica como un activo circulante, es decir, se espera que se convierta en efectivo en un plazo menor a un año. Por lo tanto, es fundamental que la empresa tenga una buena gestión de cobros para asegurarse de que estos derechos se conviertan en efectivo en el plazo previsto.
Una buena gestión de cobros puede ser clave para mantener la liquidez de la empresa y evitar problemas financieros a corto plazo. Por eso, es recomendable que se establezcan políticas claras de crédito y cobros, que se realice un seguimiento periódico de los saldos pendientes y que se establezcan mecanismos de comunicación efectivos con los clientes morosos.